El triángulo mágico
Todo se reanudó en los años 90, cuando nuestro abuelo nos quiso enseñar cómo construir colmenas caseras tal y como le había enseñado su padre. A la primavera siguiente 3 de las 9 colmenas que habíamos construido se llenaron con enjambres de forma natural. En el mes de agosto de ese mismo año tuvimos nuestra primera cosecha de miel casera, estrujada con nuestras propias manos.
Viendo nuestro interés por el funcionamiento de las colmenas año tras año, y siendo la apicultura una de las pocas actividades en las que los 3 hermanos de 7, 12 y 14 años podían estar juntos, disfrutando sin pelearse, ni competir entre nosotros, sino colaborando para realizar distintos ensayos con las colmenas: particiones, selección de las mejores reinas en base a su producción de miel de la campaña anterior, nuestra madre decidió comprarnos otras 10 colmenas industriales tipo langstroth y el primer extractor de miel con motor.
Aquí se unió uno de nuestros tíos, que por aquel entonces ya tenía 250 colmenas situadas en la costa. Él nos aportó además de su experiencia, libros y cursos para continuar nuestra formación.
Sin darnos cuenta, entre los años 2000 y 2012 unos estábamos terminado el doctorado y otros la licenciatura en veterinaria.
También en esos años nos pudimos formar con investigadores de la Universidad de Kentucky (EEUU), el Centro nacional de Investigación de México y como no, la Facultad de veterinaria de Lugo, en la que hemos conseguido especializarnos en las distintas disciplinas en las que ejercemos a día de hoy.
En el año 2008 nos involucramos activamente en APLA (Asociación Provincial Lucense de Apicultores) en la que coincidimos con muchos apicultores; los más veteranos nos apoyaron con su experiencia y sabiduría, y los más jóvenes con sus ganas de comerse el mundo. Aquí debemos destacar a un colega, veterinario de profesión que, conjuntamente con nosotros creó la marca MEL O ABELLEIRO.
Y así , 30 años después, hemos llegado a estos días en los que nuestro principal objetivo es seguir aprendiendo disfrutando de este mundo tan apasionante, en el que recordamos a todos los que nos fueron inculcando los valores que os queremos hacer llegar a vuestras casas a través de nuestros productos: pasión por mantener una tradición familiar, respeto al medio que nos rodea y del cuál se alimentan nuestras abejas y calidad humana que nos ha permitido llegar a dónde estamos.
Esperamos que lo percibas y disfrutes en cada cucharada de MIEL O ABELLERIO.
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